La POP reclama una normativa que proteja a los pacientes crónicos con motivo del Día de la Discapacidad

03 Diciembre

Asociaciones

La Plataforma de Organizaciones de Pacientes (POP) ha reclamado la creación de una normativa de protección de la situación de cronicidad que aporte las garantías necesarias a las personas que cada día conviven con una enfermedad “que supone un gran impacto en distintos ámbitos de su vida pero que no tienen reconocida la discapacidad porque el baremo para concederla no está adaptado a esta realidad”. Así lo ha manifestado con motivo del Día Internacional y Europeo de la Discapacidad que se celebra este 3 de diciembre.

Las enfermedades crónicas son patologías de larga duración. La cronicidad hace, por tanto, que los pacientes sean más frágiles y se encuentren en una situación de vulnerabilidad en muchos ámbitos. Asimismo, por los síntomas asociados, las enfermedades crónicas conllevan muchas veces una discapacidad o unas condiciones que limitan a las personas que conviven día a día con estas.

Los síntomas que sufren las personas con enfermedades crónicas hacen que no puedan disfrutar de su vida diaria con normalidad. La enfermedad no solo impacta en la salud física, también tiene consecuencias en su vida social, económica o educativa, entre otros ámbitos, y afecta en el estado de ánimo de estas personas, que, con frecuencia, llevan asociados estados de ansiedad y/o depresión.

Asimismo, otro de los ámbitos que se puede ver resentido para estas personas es el laboral. Según el estudio ‘El dolor en la enfermedad crónica desde la perspectiva de los pacientes’, elaborado por la POP y la Sociedad Española del Dolor (SED), solo el 46% de las personas que tienen una enfermedad crónica y dolor se encuentra laboralmente activas y el 70% afirma que tiene un menor rendimiento por la falta de concentración causada por el dolor.

Pese a esta situación, según el citado informe, solo el 42% de las personas con enfermedad crónica y dolor tiene reconocida una discapacidad, ya que la mayoría no supera el baremo necesario para conseguir el certificado. Una situación que, para la presidenta de la POP, Carina Escobar, “no se puede perpetuar más en el tiempo”. “No podemos permitir que estas personas y sus familias se encuentren desprotegidas, ya que no se pueden amparar ni bajo la Ley General de derechos de las personas con discapacidad ni bajo la Ley de Dependencia”.

Por este motivo, la POP reivindica la creación de una normativa que proteja esta situación de vulnerabilidad a la que se enfrentan las personas con enfermedades crónicas desde el momento en el que reciben el diagnóstico. En muchos casos, estos pacientes no llegan al porcentaje mínimo para obtener un certificado de discapacidad (un 33%) porque este baremo no está adaptado a sus necesidades y características y no incorpora a la valoración síntomas invisibles como el dolor o la fatiga. “Necesitamos una normativa estatal que dé solución a todas las necesidades no cubiertas de los pacientes”, concluye Escobar.